Ser y estar como verbos predicativos
Normalmente los verbos ser y estar son verbos copulativos, que llevan atributo y son núcleo de un predicado nominal. En estas ocasiones el verbo se presenta vacío de significado. Analicemos algunos ejemplos:
– La madre de María es simpática.
Al analizar sintácticamente esta oración señalaremos en primer lugar el sintagma nominal sujeto (La madre de María) y el sintagma verbal predicado nominal (es simpática). Si analizamos a fondo el sintagma nominal sujeto diremos que el núcleo de este sintagma es el nombre madre, la el determinante y de María un sintagma preposicional que funciona como complemento del nombre madre. En el predicado nominal tendremos la forma verbal es como núcleo verbal y el sintagma adjetival simpática, que realiza la función de atributo, ya que, como podemos comprobar, se puede sustituir por el pronombre lo (La madre de María lo es) y concuerda en género y número con el sujeto.
– El agua de la fuente estaba fría.
Dividiremos esta oración en sintagma nominal sujeto (El agua de la fuente) y sintagma verbal predicado nominal (estaba fría). Al núcleo de sintagma nominal sujeto (agua) le acompañan un determinante (el) y un sintagma preposicional (de la fuente) que realiza la función de complemento del nombre. En el sintagma verbal predicado nominal encontramos estaba como núcleo verbal y el sintagma adjetival fría como atributo. Vemos que fría puede sustituirse por lo (El agua de la fuente lo estaba) y concuerda en género y número con el sujeto.
Hasta aquí hemos visto el uso copulativo de los verbos ser y estar, que es el más frecuente. Pero podemos encontrarnos también estos verbos como verbos predicativos, donde el verbo sí posee un verdadero significado. Veamos cuando sucede esto:
– El verbo ser funcionará como verbo predicativo cuando signifique suceder u ocurrir.
Ejemplo: El accidente fue en la autovía > El accidente ocurrió en la autovía.
En esta oración encontramos el sintagma nominal el accidente, que realiza la función de sujeto, y el sintagma verbal fue en la autovía, que en este caso constituye un predicado verbal. Así, en el sujeto tenemos el nombre accidente como núcleo del sintagma nominal y el determinante el que lo acompaña. En el predicado podemos señalar el verbo fue como núcleo verbal y el sintagma preposicional en la autovía que realiza la función de complemento circunstancial de lugar.
– El verbo estar funcionará como verbo predicativo cuando indique estar en un lugar.
Ejemplo:Ayer estuve en casa de Ana.
En esta ocasión el sujeto (yo) está omitido y, por tanto, lo que encontramos es un sintagma verbal (Ayer estuve en casa de Ana). En esta oración el predicado es verbal, pues podemos ver como el verbo estar aquí significa estar en un lugar. El núcleo de este sintagma verbal es estuve y encontramos además un sintagma adverbial (ayer) que realiza la función sintáctica de complemento circunstancial de tiempo y un sintagma preposicional (en casa de Ana) que funciona como complemento circunstancial de lugar, el cual, en su interior, lleva un sintagma preposicional (de Ana) que funciona como complemento del nombre casa.
Como podemos ver en ninguna de estas dos oraciones encontramos un atributo, puesto que el atributo solo aparece cuando el verbo es copulativo y el predicado es nominal.