La ciudad de los prodigios
Hoy en nuestro portal nos centraremos en una de las obras más importantes del escritor español Eduardo Mendoza, “La ciudad de los prodigios”.
La historia sucede en la Barcelona de finales del siglo XIX y principios del XX. El protagonista, Onofre Bouvila, un campesino de tan solo 13 años, viaja a Barcelona para buscar una vida mejor.
Nada más llegar a Barcelona se instala en una pensión dirigida por un señor llamado Braulio y su hija Delfina. Para poder pagar la habitación busca desesperadamente cualquier trabajo, pero es Delfina quien se lo ofrece.
El novio de Delfina pertenece a un grupo anarquista y ofrece a Onofre trabajo repartiendo panfletos anarquistas en el lugar donde se realizara la Exposición Universal de 1888.
Como consecuencia del éxito que ha tenido repartiendo los panfletos, a Onofre se le ocurre que podría vender o dedicarse a lo que quisiera. Decide entonces vender crecepelo, y para ello busca a un ayudante, Efrén Castells. Juntos comienzan así su aventura en el mundo laboral. Deciden incluso ampliar su radio de acción negociando con objetos robados, para ello amplían la plantilla contratando a un grupo de muchachos que les suministraran esos objetos.
Un tiempo después, Onofre tiene problemas con la policía por el reparto de los panfletos. Conoce entonces a un abogado llamado don Humbert Figa y Morera, quien ofrece a Onofre trabajar para él o ir a la cárcel.
Onofre acepta y comienza a trabajar para el abogado, sin saber que éste es el líder de un grupo mafioso con oscuros negocios. Onofre comienza a moverse por cabarets, prostíbulos, y a relacionarse con proxenetas, prostitutas o traficantes de drogas. Un tiempo después llega incluso a acabar con un grupo mafioso rival, quedándose Onofre como líder de éste.
Onofre aprende de don Humbert Figa y comienza a invertir en el próspero negocio inmobiliario de Barcelona, incluso llegando a hipotecar su casa del pueblo. En poco tiempo, Onofre consigue una gran fortuna.
Un día que acompañaba a su jefe en su residencia de campo, conoce a su hija Margarita, de la que se enamora, pidiéndole a su padre la mano poco después. Don Humbert acepta, pero su esposa se niega, ya que quiere que Margarita se case con otro joven llamado Canals i Rataplán.
Onofre manda a su fiel amigo Odón Mostaza a que elimine a ese joven. Onofre denuncia también a Mostaza del asesinato para eliminar pruebas.
Un tiempo después decide sacar a Delfina de la cárcel, ya que había sido encarcelada como consecuencia de colaborar junto a su hermano con el grupo anarquista. La hace pasar por una gran actriz llamada Honesta Labroux y monta una empresa de cine.
Poco después, como consecuencia del golpe de estado de Primo de Rivera, tienen que huir a su pueblo natal. Allí Onofre decide encerrar a Delfina en un psiquiátrico para volver poco después a Barcelona.
De nuevo en Barcelona, decide fabricar una máquina voladora para exhibirla en la Exposición Universal de 1929. Para ello contrata a un ingeniero, de cuya hija, María Belltall, acaba enamorándose.
Juntos prueban la máquina voladora delante de todo el público, pero fracasan y se estrellan en el mar. Es entonces cuando se comienza a crear una leyenda entorno a la desaparición de Onofre y la joven, ya que la policía no encuentra sus cuerpos. Piensan que han escapado juntos y que viven seguros junto a sus riquezas, y que incluso, él ha sido quien ha provocado el posterior crack en la bolsa de Nueva York.