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La argumentación (segunda parte)

Publicado por Lourdes

argumentacionEn el post de ayer pudimos explicarte las características principales de los textos argumentativos, sus diferentes tipos de argumentos y sus estructuras. Si no pudiste leerlas puedes leer el enlace que te doy a continuación para acceder a dicho artículo.

La argumentación (primera parte)

Pues bien, hoy ya podemos continuar con la explicación de los textos argumentativos centrándonos, sobre todo, en sus principales rasgos o marcas lingüísticas que nos ayudarán a distinguir perfectamente que se trata de un texto de este tipo.

RASGOS LINGÜÍSTICOS

Uno de las marcas fundamentales de los textos argumentativos es la subjetividad. Para expresarla se puede hacer uso de los siguientes procedimientos:

o Uso de la primera persona en las formas verbales, en los adjetivos y pronombres.

o Vocabulario connotativo en sus argumentos que demuestran los conocimientos o experiencias previas que el autor tiene de la tesis principal sobre la que gira el texto.

Otro rasgo importante de los textos argumentativos es el de la claridad, la cual es manifestada a través de:

o Una presentación ordenada de las ideas respetando el orden de las partes del texto de tesis, cuerpo del argumento y conclusión.

o Para que la claridad sea lo más completa posible hay que hacer el mayor uso posible de conectores del discurso pues nos ayudarán a marcar el camino de las partes de la argumentación y a entenderlo mucho mejor.

o Otro recurso también utilizado para demostrar la claridad del texto es la repetición de palabras o conceptos clave.

Además, es importante destacar que los textos argumentativos también se caracterizan por su objetividad. A pesar de que el autor puede tener una opinión personal sobre el tema, es esencial que se presenten argumentos basados en hechos y evidencias para apoyar su punto de vista. Esto contribuye a la credibilidad y la eficacia del texto.

Rigor:

o Si resulta que el texto argumentativo es de carácter científico, se emplearán de manera abundante los tecnicismos. Si por el contrario el texto trata sobre algún tema más general conocido popularmente, el vocabulario utilizado será estándar.

o También se emplean unas estructuras sintácticas que matizan o precisan conceptos como por ejemplo las oraciones subordinadas adjetivas, adverbiales y sustantivas.

o Para llamar la atención del lector u oyente se hace uso de la función apelativa y así persuadirlo de alguna manera a través de:

 Recursos retóricos.

 Modalidades oracionales exclamativas o interrogativas, etc.

Coherencia:

o El texto argumentativo debe ser lo más coherente posible y para ello tiene que basar su discurso en argumentos válidos, oportunos y consistentes.

TIPOLOGÍA: los tipos de textos argumentativos con los que nos podemos encontrar pueden ser de dos tipos diferentes:

– Argumentación científica.

– Textos especializados.

RASGOS DISCURSIVOS

Además los rasgos lingüísticos que caracterizan un texto argumentativo que hemos visto anteriormente, existen otras marcas en las que nos podemos fijar para confirmar que se trata de este tipo de textos.

La definición: es utilizada para definir lo que significan los diferentes términos de importancia sobre los que se hablará en la argumentación. Con este recurso se demuestra la profesionalidad del autor y los conocimientos que sobre el tema a tratar tiene.

La comparación: este recurso es usado para hacer más sencilla la explicación del tema.

Las citas: dan prestigio al discurso del argumentador y consiste en reproducir las palabras textuales de algún experto en el tema del que se está hablando.

La enumeración acumulativa: al dar una lista de argumentos se intensifica la explicación.

La ejemplificación: acercan la experiencia propia del autor y ayudan a entender mejor el contenido de la argumentación.

La interrogación: con este recurso lo que se pretende es captar la atención del lector o el oyente de manera que se le provoque, le haga pensar, se comprueben sus conocimientos, etc.

Además, es importante mencionar el uso de la refutación en los textos argumentativos. Este recurso consiste en anticiparse a los posibles contraargumentos que pueda tener el lector y refutarlos dentro del texto. Esto no solo fortalece la argumentación del autor, sino que también demuestra su conocimiento profundo sobre el tema.

En resumen, los textos argumentativos son una herramienta esencial en nuestra comunicación diaria. Ya sea en un debate, un ensayo, un artículo de opinión o incluso en una conversación casual, la capacidad de argumentar de manera efectiva es una habilidad invaluable que todos deberíamos desarrollar.