Lengua

Deixis

Publicado por Pablo

deixis.jpgPara la lingüística, la deíxis se refiere al fenómeno en el que, para el correcto entendimiento de una palabra o frase determinada, se requiere estar en posesión de información contextual. Así, las palabras son deícticas cuando su significado semántico está fijado, pero su significado denotativo puede variar en función del tiempo o el espacio. O, dicho de otra forma, las palabras que requieren información contextual para realizar su significado completo -como, por ejemplo, los pronombres- son deícticas.

Por poner un ejemplo: para comprender una oración como «tienes que ir allí», necesitamos algún tipo de información adicional, relacionada con el contexto. Si no disponemos de esa información, no entenderemos el mensaje, la frase no tendrá significado.

La deíxis -que proviene de la palabra griega δεῖξις, «punto de referencia»- como fenómeno lingüístico está presente en todos los lenguajes naturales conocidos.

La deíxis, por lo tanto, es un fenómeno frecuentemente estudiado por la pragmática, y está presente no sólo en el lenguaje escrito sino muy particularmente en el hablado, y en el gestual.

La deíxis puede ser a su vez clasificada, según la palabra en cuestión se refiera a personas, a objetos, a lugares o a espacios temporales.

La deixis social es la deíxis que ocurre cuando la referencia es un personaje. A su vez, esta deíxis puede tener distintas funciones distintivas, tales como adoptar la forma «usted», de cortesía, o la forma «tú», más cercana y coloquial.

La deíxis personal es la que ocurre cuando la referencia es un participante. A su vez, esta deíxis puede adoptar distintas funciones, como la primera, la segunda o la tercera persona, así sea «yo», «tú», «él», «nosotros», «vosotros» o «ellos». También puede utilizar pronombres posesivos como «mío», «tuyo», etc.

La deíxis de lugar es la que ocurre cuando la referencia es espacial, como «allí», «aquí», etc.

La deíxis de tiempo es la que ocurre cuando la referencia es temporal, como «ahora», «entonces», etc.

Como se puede ver fácilmente, la mayoría de las palabras que cumplen una función deíctica son pronombres y adverbios de tiempo y de lugar.

También podemos dividir las deíxis según su referente en función de si es extralingüístico (en este caso se llamará exofórica), si no está presente en el discurso (de fantasía), si el referente es anterior (anafórica), o si es posterior (catafórica).

Una deíxis anafórica podría ser «Pablo se va a la playa» (Pablo es anterior a su pronombre). Una deíxis catafórica sería, en cambio, «Le diré ciertas cosas a Pablo» (el pronombre «le» es anterior a Pablo).