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Granada de los Nazaríes de Antonio Gala

Publicado por A. Cerra

Antonio Gala, aunque manchego de nacimiento, es realmente un escritor andaluz. Y no un escritor cualquiera, sino que a lo largo de su dilatada carrera literaria ha sido extraordinariamente versátil adentrándose en todo tipo de géneros (teatro, novela, poesía, periodismo, guiones para televisión, traducciones, libretos de ópera y adaptaciones teatrales). En definitiva, un autor de lo más prolífico y que también nos ha dejado pequeñas joyas inclasificables a medio camino de la novela histórica o el libro de divulgación, como es el caso de esta Granada de los Nazaríes.

En ella hace hablar a la propia ciudad de Granada, ya que es la urbe granadina la que nos habla en primera persona y nos habla de todo el esplendor que alcanzó durante los tiempos del reino Nazarí que se dio desde el siglo XIII hasta el 2 de enero de 1492, fecha en la que la ciudad fue entregada a los Reyes Católicos tras la rendición del mítico rey Boabdil.

Es decir, que Gala pone su característico florido estilo literario en boca de la ciudad para que sea ella quien nos relate su pasado musulmán. Como es habitual en su prosa, son líneas cargadas de lirismo y poesía, con un sentido de la descripción dinámico y detallista. De manera que paseamos por las casas musulmanas, por los barrios de la ciudad, por los talleres de los artesanos y los zocos de los comerciantes, y también por las mezquitas y los palacios, con la hermosa Alhambra de Granada sobre todos ellos.

Pero además de las formas de las cosas, Gala nos describe las formas de vida. Qué comen, cómo juegan, cómo bailan, cómo se trata a las mujeres o cómo sienten la religión, dedicando ahí un espacio a hablar de la convivencia de las tres culturas: el Islam, el Judaísmo y el Cristianismo.

Todo nos los presenta de modo brillante, deteniéndose cuando hace falta para mostrarnos las intrigas palaciegas o estableciendo comparaciones entre las elegantes formas de vida del reino nazarí de Granada todavía sin conquistar, y las que había en el resto de España ya cristianizada.

Por lo tanto es una obra de lo más singular, fruto de la devoción de Gala hacia esa ciudad y su historia, sobre la cual se documentó en profundidad, para luego trasladar todo ese saber de forma magistral y literaria. Porque este libro se puede leer de muchas formas, como libro de historia, como excepcional guía previa a un viaje o sencillamente como una joya literaria.