La niebla
En el artículo que hoy tratamos en nuestro portal de La Guía de la Lengua nos vamos a centrar en hacer un resumen del argumento de una de las novelas con uno de los finales más impactantes que se hayan escrito jamás, «La Niebla». Y es que cualquiera que haya leído esta obra o haya visto su adaptación cinematográfica no puede negar que su final le deje en shock y tarde un tiempo en recuperarse de semejante desenlace.
El responsable de esta explosión de sensaciones tan horripilantes no podía ser otro más que el archiconocido novelista Stephen King, nacido en Estados Unidos en el año 1947, el cuál todavía se dedica a su gran pasión, escribir, aunque con un ritmo mucho más liviano.
«La niebla» es una obra literaria que pertenece al género del terror que fue publicada en diversas ocasiones. Primero como parte de la colección «Dark Forces», después como un cuento más de la antología del mismo autor titulada «Skeleton Crew» y finalmente en el año 2007, coincidiendo de manera voluntaria con el estreno de su versión cinematográfica.
La historia de «La Niebla» se sitúa en un pequeño pueblo de Maine que se ve azotado por una atroz tormenta eléctrica. Éste fenómeno meteorológico será el origen de algo que mantendrá las vidas de los habitantes de este lugar pendientes de un hilo ya que esa agresiva tormenta ha abierto un portal de otro mundo cuyos habitantes son criaturas horripilantes y asesinas que acabarán con la vida de cualquiera que se ponga en su camino.
Al abrirse ese portal, estas criaturas han podido entrar en este pueblo sin ningún impedimento y vagan por él en busca de víctimas.
Pero la tormenta eléctrica no sólo trajo consigo a esas violentas criaturas, sino también una espesa niebla que inundó el pueblo y que hacía imposible avistar esos seres.
La trama se centra en un gran grupo de personas que se encontraban tranquilamente haciendo la compra en un supermercado. Entre ellos se encontraban dos soldados, una fanática religiosa y el protagonista junto con su hijo que es, al mismo tiempo, el narrador.
En un principio sólo existe incertidumbre y desconfianza hacia lo que les rodeaba, pero la muerte del gerente del supermercado a manos de unos tentáculos gigantes y el posterior suicidio de los dos soldados hicieron sembrar el pánico entre los supervivientes.
A partir de entonces el grupo se divide en dos bandos estando uno de ellos liderado por la fanática religiosa cuyo único argumento era que el Apocalipsis había llegado como castigo de Dios y que era imprescindible hacer un sacrificio de alguno de los miembros del grupo para mostrar su redención.
Después de numerosos ataques por parte de las criaturas y también de los fanáticos religiosos, el protagonista junto a su hijo y algunas personas más consiguen salir del supermercado y entrar en un coche con el que se aseguraron un refugio hasta que se les acabó la gasolina.
En ese momento es cuando los tripulantes del vehículo se dan cuenta de que su final ha llegado y su destino puede ir por dos caminos: uno, salir del coche y esperar a que alguna de esas criaturas los devoren, o dos, acabar con su vida uno a uno allí mismo con la pistola que tenían. A todos les parece ésta última como la mejor acción pero el único problema es que faltaba una bala para que todos pudiesen tener el mismo final. El protagonista decide sacrificarse y dejar su destino a manos de los seres y por ello les pega un tiro a cada uno de sus acompañantes, incluido su hijo. Roto de dolor sale del coche provocando a las criaturas y de repente, cuando mira a su alrededor descubre que la niebla había desaparecido y las criaturas habían sido exterminadas por los militares.