Literatura persa
La literatura persa abarca el conjunto de obras literarias escritas en lengua persa a lo largo de la historia, lo que nos deja un enorme período de tiempo que engloba cerca de dos mil quinientos años de producción literaria.
Podemos dividir ese largo devenir histórico en tres grandes períodos. Por un lado, tenemos la literatura persa pre-islámica, es decir, anterior a la conquista e influencia cultural del islam; por otro, la literatura medieval de influencia islámica; y por último, la literatura persa contemporánea.
Son muy pocas, en general, las obras que se han conservado de la literatura persa pre-islámica, o de la «Antigua Persia». La mayoría de las que se conocen pertenecen a las inscripciones reales de los reyes aqueménidas, que tuvieron su esplendor durante los siglos VI y V a.C (particularmente, con los reinados de Darío I y Jerjes). También se han conservado algunos escritos zoroastrianos que se conservaron fuera de la zona de influencia islámica una vez que éstos conquistaron Persia.
La conquista islámica produjo en sus inicios una total islamización de la cultura. No obstante, los escritores persas consiguieron retomar su lengua para la producción literaria cuando las estructuras políticas se estabilizaron. En particular, la literatura persa floreció durante los califatos Omeya y Abasí. Durante esta etapa, los escritores persas utilizaron un interés proto-nacionalista como motor para recuperar el esplendor de su antigua cultura.
Casi la totalidad de los escritos durante esta época temprana tomaba forma de poesía. De hecho, una de las características de la literatura persa es su capacidad de versificar cualquier tipo de género, sea literario, científico o filosófico. La poesía dominó genéricamente durante toda la época islámica, si bien existieron otros géneros como el ensayo, cuyo referente más significativo es el «Chahār Maqāleh», de Nizami Arudhi Samarqandi. Las biografías y en general las obras históricas fueron escasos, y por ello son hoy muy valiosos para los historiadores especialistas en esta época. El «Tarij-i Beyhaqi» de Abolfazl Beyhaghi tal vez sea el más conocido.
En cuanto a la narrativa, es obligatorio citar algunas obras que se han convertido en clásicos atemporales. «Las mil y una noches» seguramente sea la obra más famosa, que narra la historia de una reina sasánida que ha de contar una historia cada noche para demorar su ejecución. Dentro de este gigantesco recopilatorio existen historias por todos conocidas, como Aladino, Ali Babá y los cuarenta ladrones, o Simbad el marino. A través de estos cuentos, la literatura persa ha penetrado en las conciencias de todo el mundo y ha dejado una influencia no sólo literaria sino imaginativa que resulta difícil de superar.