Signos ortográficos auxiliares
Anteriormente, en nuestro blog, hemos hablado ya de algunos de los signos ortográficos auxiliares como, por ejemplo, la barra o el guión. En esta ocasión, nos centraremos en exponer cómo ha de ser el empleo de otros dos signos: el asterisco y el apóstrofo.
El ASTERISCO.
Este signo ortográfico con forma estrellada (*) se escribe en la parte alta del renglón y se usa en las siguientes ocasiones:
1. Cuando se quiere hacer una llamada para notas o a pie de página.
Ejemplo: Calderón* escribió La vida es sueño**.
En los casos en que haya que hacer un gran número de llamadas para notas, se prefiere emplear la numeración arábiga puesto que multitud de asteriscos puede parecer crear un efecto antiestético.
2. El asterisco también se emplea en obras de gramática para señalar construcciones que son agramaticales, es decir, incorrectas desde un punto de vista gramatical.
Ejemplos:
*Los niños corrían descalzo alrededor del molino.
*Habían muchas personas en la manifestación de ayer.
3. Cuando se reconstruye la etimología de un vocablo, se usa el asterisco para señalar una palabra hipotética que no aparece en fuentes escritas.
Ejemplos:
*Bava.
*Appariculare.
El APÓSTROFO.
Este signo ortográfico con forma de coma alta (’) se escribe en la parte alta del renglón y tiene un uso escaso en el español en comparación con otros idiomas. Principalmente, en español, se emplea en los siguientes casos:
1. Podemos encontrar el apóstrofo en ediciones de textos antiguos no modificados para señalar que la vocal final de una palabra ha sido elidida cuando la siguiente palabra comienza también por vocal. Sobre todo, esto ocurre en palabras que pertenecen a categorías gramaticales como la preposición, la conjunción o el artículo.
Ejemplo: D´aquel.
2. El apóstrofo se emplea también para mostrar en la escritura la eliminación de sonidos que se refleja en el habla. Es muy frecuente encontrarlo en textos literarios que plasman la forma de hablar de personajes de baja clase social.
Ejemplo: No voy a ir pa’ que me eche la bronca.
3. Escribimos apóstrofo al reproducir palabras de otros idiomas que lo llevan.
Ejemplos: O’Neill, C’est moi, L’Hospitalet de Llobregat.
Debemos evitar el uso del apóstrofo en los siguientes casos:
1. Cuando expresemos un año solamente con las dos últimas cifras no debe colocarse apóstrofo delante de ellas, bastará con escribir solo las dos cifras o las dos cifras con un guión delante.
Ejemplo: Expo 92 o Expo-92
2. No debe emplearse el apóstrofo para señalar el plural de una sigla. En español, las siglas no cambian según el número, este se expresa mediante el artículo.
Ejemplo: ONG > *ONG’s > las ONG
3. En español, tampoco se usa el apóstrofo entre las horas y los minutos. Para expresa la hora empleamos el punto o los dos puntos.
Ejemplo: *Las 18’30 h. > las 18.30 h. o las 18:30 h.
4. En expresiones numéricas con decimales tampoco, en español, emplearemos el apóstrofo. Para ello, tendremos que usar la coma preferiblemente o , en su caso, el punto.
Ejemplo: *45’234 > 45,234 o 45.234.
Esperamos haberte ayudado a resolver las dudas que plantea el empleo de estos signos ortográficos auxiliares.