Contracción o crasis
El fenómeno de la contracción, también conocido como crasis, es un proceso morfo-fonológico consistente en la fusión de dos o más palabras para terminar formando una sola.
Para proceder a la contracción normalmente se recurre a diversas figuras de dicción, como las de transformación (una figura de transformación, también llamadas metaplasmo, consiste en la alteración de la escritura o de la pronunciación de las palabras siempre que no se altere su significado) y la de omisión.
Dentro de las figuras de transformación existen varias posibilidades:
- La prótesis, la epéntesis y la parágoge consisten en la adición de fonemas a una determinada palabra (que puede ser respectivamente al principio, en el interior o al final de la palabra raíz).
- La aféresis, la síncopa y el apócope consisten en la eliminación de fonemas a una determinada palabra (que también puede ser respectivamente al principio, en el interior o al final de la palabra raíz).
- La diástole (también llamada éctasis) y la sístole consisten en la alteración de la tonicidad de las sílabas.
- La diéresis y la sinéresis consisten en la alteración de los diptongos y de los hiatos.
- La sinalefa y la ecthlipsis consisten en la unión de varias palabras por sus fonemas coincidentes.
- La metátesis consiste en la transposición de un fonema en la palabra raíz.
La más común entre todas ellas es la sinalefa, que podemos definir, más detalladamente, como la pronunciación, en una única sílaba, de la vocal final de una de las palabra y también de la la vocal inicial de la palabra siguiente.
La sinalefa es especialmente común en la poesía, ya que afecta directamente a la medida del verso y esto la convierte en un recurso muy utilizado por los poetas para la creación del ritmo y la aplicación, en general, de los principios poéticos de la métrica.
Esta es una forma común y perfectamente aceptada de realizar contracciones en español. La sinalefa poética se utiliza mucho en la lengua coloquial oral, y ejemplos es este tipo son «desto» y «desta» («de esto» ó «de esta»), o también «esotro» y «esotra» (en lugar de decir «ese otro» y «esa otra», respectivamente).
Ejemplos de contracciones en español son las siguientes:
- “A” y “El” forman “Al”
- “De” y “El” forman “Del”
- “De” y “Ella” forman “Della”
- “Donde” y “Quiera” forman “Doquiera” y “Doquier”
- “Entre” y “Ambos” forman “Entrambos”
- “Otra” y “Hora” forman “Otrora”
- “Eso” y “Otro” forman “Esotro”
Algunas de las anteriores fórmulas dan como resultado palabras válidas para la lengua escrita, como «Al», «Del», «Doquier» o «Otrora», y otras quedan reducidas al mundo de la lengua hablada.