La gramática tradicional
La gramática es la disciplina principal para cualquier tipo de estudio sobre las lenguas y sus normas internas. Mediante la gramática se establecen relaciones entre las distintas partes de las oraciones, y se puede llegar a entender cómo funciona el lenguaje, qué componentes lo forman, cómo se usan, y por qué.
Sin embargo, existen diferentes niveles de estudio y para cada uno de ellos resulta apropiada un tipo de gramatical. Porque, en efecto, la gramática no es unívoca ni se puede afrontar de una única manera. Antes bien lo contrario, existen diferentes gramáticas, que sirven para fines muy diversos.
La gramática tradicional es la más básica de todas ellas. En realidad, en el campo del estudio universitario y académico, los más renombrados especialistas en filología ya hace tiempo que la han desestimado. Y sin embargo, sigue siendo la gramática tradicional la que aprenden los niños en las escuelas, y la que estudian los jóvenes en los colegios y los institutos.
Realmente, y aunque pueda parecer extraña esta diferencia, la cuestión principal es que la gramática tradicional sigue siendo la más accesible y la que de manera más clara es capaz de proveer a los que inician sus estudios gramaticales con unos instrumentos y herramientas básicos.
La gramática tradicional consiste básicamente en la clasificación y la relación. Mediante su uso, todas las palabra de un determinado lenguaje quedan categorizadas: pueden ser verbos, sustantivos, adjetivos, adverbios, pronombres, determinantes o conjunciones. Y no pueden ser ninguna otra cosa. A su vez, a cada uno de estos grupos se dividen en grupos más pequeños y más específicos. Y cada uno de ellos tiene una forma de actuar, unas reglas fijas que han de cumplirse siempre, en todos los casos, y una manera específica de relacionarse con las palabras de los demás grupos.
Dado su amplio objeto de estudio, la gramática tradicional ha dado origen a dos disciplinas propias que se basan en sus preceptos. Una es la sintaxis, que estudia las relaciones entre los elementos de una oración. El paradigma más conocido y aceptado de la sintaxis es que las oraciones cuentan con un sujeto y un predicado que concuerdan en género y número. Aunque en la mayoría de los casos es cierto, la gramática generativa ya ha encontrado problemas a este axioma y ha provocado importantes cambios en su forma de verlo. La otra disciplina es la morfología, que estudia las variaciones que pueden sufrir las palabras, es decir, los casos en los sustantivos y las conjugaciones en los verbos. La unión de ambas, la llamada morfosintaxis, estudia ambas cosas a la vez, es la subdisciplina lingüística que más se enseña en las escuelas y la más acabada manifestación de lo que es capaz de hacer la gramática tradicional: analizar oraciones.