Los pronombres personales
En un post anterior de este blog de Lengua ya presentamos a grandes rasgos a los pronombres. Pero hoy es el momento de hablar con más detenimiento y especificidad de los pronombres personales, los cuales presentan una serie de características que los diferencian del resto de pronombres.
La primera de ella es que tienen rasgo de persona gramatical. Se corresponden con las tres personas gramaticales y tienen variaciones de número, entre plural y singular.
Además pueden presentar tanto formas tónicas como átonas.
Las tónicas son: yo, tú, vos, él, ella, ello, mí, ti, sí, conmigo, contigo, consigo, nosotros, nosotras, vosotros, vosotras, ellos, ellas, usted, ustedes.
Y las átonas son: me, te, se, nos, os, le, la, lo, les, las, los.
Además hay que destacar que los pronombres personales de tercera personal presentan un subsistema de género con formas de masculino, femenino y neutro. Algo que les hace similares a ciertos determinativos, tanto artículos como demostrativos:
Él, el, este
Ella, la, esta
Ello, lo, esto
Otra característica peculiar es que los plurales de primera y segunda persona: nosotr@s, vosotr@s, no son plurales morfológicos. De hecho, sí que existen las palabras “yoes” y “túes”. En cambio se usan plurales semánticos y sintácticos, los cuales si actúan de sujeto obligan a las formas pertinentes del verbo.
Hay una forma peculiar que es la de usted y ustedes, que son pronombres de tercera persona desde una perspectiva sintáctica, ya que concuerdan con el verbo de esa forma.
Usted llegó, ustedes tienen
Pero en cambio, desde la perspectiva comunicativa se refieren a una segunda persona, a un interlocutor presente y atento a la comunicación.
También merece una explicación aparte el pronombre personal átono lo, ya que tiene dos valores: masculino y neutro. Puede funcionar tanto como referente de un sustantivo masculino. Por ejemplo, bébelo (bebe el vino). Pero también es neutro si hace referencia a cosas imprecisas, si sustituye a atributos o hace mención a contenidos oracionales: Se lo comenté. Antonio lo tiene. No lo comprendo.
Y como caso excepcional en la gramática del español, hay que remarcar el uso del vos, especialmente en ciertas zonas de Argentina. Este pronombre se usa en lugar de tú. Así que mientras en España al interlocutor se le tutea, en Argentina se le vosea, lo cual además se manifiesta con terminaciones verbales distintas, pero de eso hablaremos más adelante.
Tú te marchas
Vos te marchás