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Presente y pretérito imperfecto de subjuntivo

Publicado por Aroa Plaza

El modo es uno de los accidentes del verbo y a través de este el hablante manifiesta la actitud personal que adopta ante la acción verbal. Podemos establecer tres modos distintos:

1. Modo indicativo: Cuando el hablante adopta una actitud objetiva.

Ejemplo: Ayer fui al cine con María.

2. Modo subjuntivo: Cuando el hablante adopta una actitud subjetiva.

Ejemplo: Ojalá no llueva mañana.

3. Modo imperativo: Cuando el hablante adopta una actitud de orden o mandato.

Ejemplo: Compra el pan.

En este artículo vamos a centrarnos en el modo subjuntivo y concretamente en el presente y en el pretérito imperfecto.

Como ya hemos apuntado en el subjuntivo el hablante adopta una posición subjetiva, pretende expresar una duda, un temor o un deseo. Si bien esto es cierto, en el modo subjuntivo también ocurre en ocasiones, que el modo no depende tanto de la actitud del hablante sino que obedece a aspectos sintácticos. Normalmente el modo subjuntivo lo encontramos en las proposiciones subordinadas, lo que quiere decir que el modo subjuntivo se encuentra principalmente en oraciones compuestas.

Ejemplos: Quiero que vengas mañana.

Díselo cuando llame.

– Presente y pretérito imperfecto de subjuntivo.

presentes

El presente de subjuntivo es un tiempo verbal que puede hacer referencia a un tiempo presente o aun tiempo futuro, pero jamás a un tiempo pasado.

Ejemplos: No quiero que te quedes (indica presente).

Es preferible que no vayas mañana (indica futuro).

Al igual que el presente, el pretérito imperfecto de subjuntivo puede hacer referencia al presente y al futuro, pero, además, también puede hacer referencia al pasado.

Ejemplos: Me voy, porque si no me fuera, discutiríamos (indica presente).

Me dijeron que presentase una queja mañana (indica futuro).

Fue una suerte que no ocurriera nada (indica pasado).

Ya que ambos, presente y pretérito imperfecto de subjuntivo, pueden indicar presente y futuro, es necesario saber cuándo debemos usar uno u otro tiempo. Normalmente, debemos fijar nuestra atención en el verbo principal de la oración compuesta para saber cuál de los dos tiempos hay que incluir en la proposición subordinada. De este modo, tenemos que:

– Cuando el verbo principal de una oración compuesta está en presente (amo), en pretérito perfecto compuesto (he amado), futuro (amaré) y futuro compuesto (habré amado) de indicativo; el verbo de la proposición subordinada aparece en presente de subjuntivo.

Ejemplos: – Le piden que no mienta.

Le han pedido que no mienta.

Le pedirán que no mienta.

Le habrán pedido que no mienta.

– Cuando el verbo principal de la oración compuesta está en pretérito imperfecto (amaba), pretérito perfecto simple (amé), condicional (amaría) y condicional compuesto (habría amado) de indicativo, el verbo de la proposición subordinada va en pretérito imperfecto de subjuntivo.

Ejemplos: – Le pedían que no mintiera.

Le pidieron que no mintiera.

Le pedirían que no mintiera.

Le habría pedido que no mintiera.