Charlotte de David Foenkinos
El autor francés David Foenkinos publicó en el año 2014 la obra Charlotte, una novela escrita como no se suelen escribir las novelas, ya que se trata de un texto redactado íntegramente con frases cortas y punto y aparte. No hay párrafos largos, ni diálogos, ni frases subordinadas. Son oraciones cortas que casi se convierten en versos, lo que hacen que la obra parezca un largo poema o una especie de himno en honor de su protagonista y todo el dolor que sufrió en su corta vida.
De hecho, el autor ha confesado que una de las cosas que más le costó a la hora de materializar este libro, fue encontrar ese estilo, que creyó el único válido para mostrar tanta tragedia.
Al fin y al cabo invirtió hasta 8 años en el libro. Teniendo una primera fase que consistió en conocer a su personaje. Se trata de Charlotte Salomon, una pintora judía de origen alemán que huyendo de los nazis se refugió en la Costa Azul francesa. Si bien, no se libró de ser detenida y trasladada al campo de concentración de Auschwitz, donde finalmente murió a la corta edad de 26 años (1917 – 1943).
La novela en realidad se basa en la propia autobiografía de la pintora. La cual en sus últimos tiempos redactó su vida, y le entregó el manuscrito a su médico para que lo custodiara. Un libro que con los años acabó en el Museo Judío de Ámsterdam y que de alguna manera se ha comparado con el célebre Diario de Ana Frank.
Así que el relato de Foenkinos se basa en ese libro de su protagonista, pero lo lleva a su escritura y lo adereza con lo que ha investigado sobre la pintora, su propio estilo literario y la pasión que ha acabado por sentir por semejante personaje. La cual vivió un constante drama familiar, no solo por la coyuntura de la política antisemita en Europa, sino también porque en su familia había una larga de tradición de suicidios femeninos, e incluso ella pudo haberse suicidado.
En fin una angustia a la que sobrevivió gracias al arte, realizando más de mil obras, con la técnica del gouache, en sus últimos años de vida. Unas obras que sin duda son el complemento ideal para su relato, tanto del de la propia artista como el del exitoso escritor francés. Y es que hay que tener en cuenta que Foenkinos se ha convertido en uno de los autores galos más respetados, inicialmente por su obra La delicadeza y ahora por Charlotte, y es que realmente su literatura alcanza altas cotas de calidad, y sobre todo es capaz de enganchar al lector y no soltarlo hasta el final del libro.
