El barón rampante de Italo Calvino
Italo Calvino (1923 -1985) es uno de los más grandes y singulares escritores que ha dado Italia a lo largo del siglo XX. Y como prueba de ello puede valer su novela El barón rampante. Una obra publicada en 1957 y que forma parte de una especie de trilogía que comenzó con la publicación en 1952 de El vizconde demediado y concluyó con El caballero inexistente de 1959.
Las tres son sus llamadas “novelas dieciochescas”. Una denominación que no solo se debe a la ambientación y los personajes que aquí aparecen, como luego veremos. También el nombre tiene relación con las claras influencias que Calvino tiene con obras del periodo de la Ilustración. Y más concretamente con los cuentos de Voltaire.
Ese es el punto de partida para una reflexión sobre la sociedad de nuestro tiempo, y también sobre el ser humano. Pero lo hace usando alegorías de corte fantástico. Algo que se ha convertido de alguna forma en el sello de identidad de toda su producción. Tanto en estas primeras novelas como en otras obras posteriores. Algunas tan grotescas como La jornada de un interventor electoral de 1963 y otras tan experimentales como Si una noche de invierno un viajero publicada en 1979.
Pero volvamos al Barón rampante. ¿Qué nos cuenta en ella? La historia de Cosimo, un aristócrata que tras enfadarse con su hermana, decide subirse a los árboles y no bajarse jamás.
Así lo hará, viviendo toda su vida entre las ramas, y se comunicará con otro de sus hermanos, Biaggio, mediante cartas. Y es gracias a eso, como conocemos sus andanzas que realmente son bastante entretenidas y divertidas. Se hace su propia casa entre la copa de un árbol, se alimenta de lo que caza y él mismo confecciona sus útiles y hasta su ropa.
Se enamorará perdidamente de Viola, una niña que se balancea en un columpio, y con la que tendrá una relación años más tarde. También tendrá otras relaciones, conocerá a ladrones, piratas, extranjeros… Y cumplirá su palabra de no vivir jamás en el suelo con el resto de seres humanos. Porque cuando han pasado muchos años, y su agilidad ya no es la misma, aprovechará que pasa cerca del bosque un globo y se agarrará a él, para volar y desaparecer.
En definitiva, una obra muy curiosa, como todo el conjunto literario de Italo Calvino. Un autor en el que por debajo de sus relatos siempre fluye una intensa carga filosófica y antropológica. En fin, un autor muy interesante de nuestro tiempo y para leer con calma.