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Antonio Muñoz Molina

Publicado por Aroa Plaza

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El escritor Antonio Muñoz Molina, nacido en el año 1956 en la localidad de Úbeda situada en la provincia de Jaén, probablemente sea la cabeza más visible de los novelistas de los años ochenta y noventa en España y el primero que entró a formar parte de la Real Academia Española. Hoy nos acercamos a su producción novelística, aunque es autor también de ensayos, diarios, artículos, relatos, etc., teniendo en cuenta que su novela pretenderá tanto suscitar el interés del lector como proporcionarle entretenimiento.

Su primera novela es del año 1986 y se titula Beatus ille, donde podemos ver ya a un maduro novelista. El año siguiente aparece la obra El invierno en Lisboa, con la que en el año 1988 consigue el Premio Nacional de Literatura y donde refleja un mundo oscuro por el que se mueve el protagonista de esta historia en la que se conjugan la intriga policiaca y el amor. Ya en 1989, Muñoz Molina publica la novela Beltenebros, que contará también con una estructura que gira en torno a una trama policiaca, pero en la que a diferencia de la anterior el narrador es el propio protagonista que busca resolver el caso. Con El jinete polaco, de 1991, consigue de nuevo el Premio Nacional; en ella, se cuenta una larga historia que se extiende desde el año 1870, en el que se produce el asesinato de Prim, hasta el año 1991 cuando se produce la Guerra del Golfo, y que surge de la conversación de dos amantes que se hallan en la habitación de un hotel. Aunque pasados por el filtro de la ficción, muchos de los hechos que aquí narra Antonio Muñoz Molina están relacionados con su vida personal.

Seis años más tarde, en 1997, aparece Plenilunio. En esta novela, que cuenta la investigación del asesinato de dos niñas, se muestran tanto las luces como los rincones oscuros del ser humano. En la obra Ardor guerrero, el escritor contará sus vivencias durante la realización del servicio militar. En 1999 escribe En ausencia de Blanca, donde la seducción y la soledad son las principales protagonistas y la línea que separa la realidad de la ficción de la realidad se vuelve increíblemente estrecha.

De 2001 es la colección de relatos titulada Sefarad, que tienen en común la defensa de toda clase de seres oprimidos durante el siglo XX. Aquí observamos la ideología del autor y su compromiso con ella que va en un sentido progresista. Podemos decir que nos hallamos ante una obra compleja, ante una novela de novelas.

Más tarde, en 2006, escribirá El viento de la luna y, en 2009, La noche de los tiempos.

Antonio Muñoz Molina es un escritor que domina el oficio, que cuida con mimo la estructura de sus novelas, que domina el uso de la palabra y escoge el adjetivo adecuado en todo momento. Es capaz de recoger todo lo bueno que se halla en la tradición literaria a nivel mundial y, al mismo tiempo, de entregarse a la experimentación. En definitiva, es un escritor que sabe mirar y plasmar con sensibilidad y sabiduría las historia que quiere contar.