Decamerón
En el artículo de hoy nos centraremos en una obra italiana conocida mundialmente escrita por Giovanni Boccaccio, autor del que nos encargamos de hablar en nuestra web en el anterior. Si te lo perdiste, puedes acceder a su biografía pinchando en el enlace directo que te proporcionamos a continuación:
La nomenclatura de esta obra, «Decamerón», proviene del griego, δέκα, que significa «diez» y ἡμέραι, «días», con lo que con éste ya nos da una pista del argumento sobre el que se desarrolla esta obra. Y es que, mediante un contexto común, se cuentan diez historias diferentes en diez días distintos.
Este contexto del que hablamos es el de un grupo de diez jóvenes que se ve obligado a marcharse de la ciudad italiana de Florencia ya que en ella, concretamente en el año 1348, estaba siendo azotada por una epidemia de peste negra.
La estancia de este grupo en las afueras de Florencia se lleva a cabo durante diez días, en los que cada día, uno de ellos es nombrado jefe, cuenta una historia y decide el tema sobre el que la siguiente historia debía tratar. Estos temas solían ser profanos como: la inteligencia del ser humano, la suerte y el amor.
Esta obra pasó a la historia por hacer uso de una prosa delicada y elegante y serviría de ejemplo a seguir para los escritores del Renacimiento y de la novela cortesana.
Con respecto a los ideales de esta obra, destaca la revelación que se llevó a cabo con ella, ya que dejó atrás la fantasía medieval llevando su prosa a una visión antropocéntrica y humanista. Además, los protagonistas de la obra defienden la idea del «carpe diem».
Con respecto a los personajes de la obra, no tienen nada que ver con los de los poemas épicos de la literatura medieval, llenos de nobleza, caballería y cortesía, sino que son mentirosos, cleptómanos y adúlteros, actitudes gracias a las cuales consiguen escabullirse de situaciones complicadas.
Pero no sólo se aleja de lo medieval con los personajes, sino que también rechaza en su totalidad la teoría teocéntrica del mundo. En su lugar, es el dios del amor, Eros, el que domina el mundo y, como consecuencia, los hombres y las mujeres tenían como objetivo vital el de disfrutar del amor en su forma emocional, pero sobretodo, física.
Las diez historias que se cuentan en el Decamerón, son de naturaleza erótica y colocan a la mujer como figura principal que lleva la trama y con una personalidad muy definida: hija de la pecadora «Eva», propensa a caer en las tentaciones, muy seductora y con una sed insaciable de relaciones sexuales.