Literatura colombiana
La literatura colombiana recoge el conjunto de textos literarios producidos en el territorio de lo que hoy es Colombia, y más particularmente, desde la independencia del país, por escritores naturales de Colombia.
Como en otros países del ámbito geográfico latinoamericano, la literatura colombiana muestra diversas voces. la indígena, la española y la negra. Naturalmente, la que más problemas ha encontrado para sobrevivir es la primera dada la naturaleza violenta de la conquista española y la, en muchos casos, naturaleza oral de la literatura producida por los pueblos precolombinos.
La época colonial tuvo en Colombia una influencia básicamente religiosa y socialmente elitista. Se escribía desde los primeros asentamientos urbanos y quien en ellos se asentaba era naturalmente la elite de los recién llegados. Las primeras manifestaciones literarias de estos grupos son las conocidas como crónicas, algo que no debe resultar sorprendente ya que en las primeras etapas de la conquista los españoles se encontraron ante un mundo, una geografía y unas culturas completamente nuevas para ellos. La descripción literaria no de todas aquellas novedades no se hizo esperar.
El nuevo ánimo político de principios del XIX, con la mayoría de las colonias buscando su independencia, influyó de manera notable en la renovación de la literatura colombiana. Una mezcla entre el nuevo fervor nacional, buscador de una nueva voz auténticamente colombiana, y la herencia del haber literario español (ahora influenciado por las tendencias románticas dominantes en Europa) marcaron el estilo de la literatura de la época. El género epistolar y la poesía se abrieron espacios en esta primitiva búsqueda de la identidad nacional.
En Colombia se promovió fuertemente el uso del idioma español y, de hecho, fue este país el primero en fundar la Academia Colombiana de la Lengua de entre todos los países latinoamericanos de habla española.
La primera obra literaria señera y reflejo de esa nueva identidad Colombia fue María, de Jorge Isaacs, novela que posteriormente se adaptaría al cine y sería la primera película producida por la industria cinematográfica colombiana. De género costumbrista, este autor y sus coetáneos se ocuparon de subrayar los rasgos más importantes de su cultura, aunque a veces cayeron en un folklorismo demasiado simplista y acrítico.
El nuevo siglo XX se abriría con el dominio literario de los novísimos, un estilo que se armaría de ironía y sarcasmo para criticar los vestigios del romanticismo y el costumbrismo. León de Greiff fue el autor más conocido.
Más adelante Colombia pasaría por las principales vanguardias, pero no sería hasta la llamada Generación del Boom cuando uno de sus autores, Gabriel García Márquez, alcanzara una verdadera fama y prestigio universal. Premio Nobel de Literatura en 1982, García Márquez es uno de los grandes referentes del llamado «realismo mágico».