Obras de Mariano José de Larra (II)
En el artículo de ayer comenzamos con la primera parte de este artículo dedicado a hacer un análisis de las obras más relevantes de Mariano José de Larra, mayormente conocido por su seudónimo «Figaro» en los artículos que escribió en la época del romanticismo español.
Si te perdiste esta primera parte, no te preocupes pues puedes acceder a ella directamente, presionando el enlace directo que te proporcionamos a continuación.
Obras de Mariano José de Larra
Continuando con el legado literario de Mariano José de Larra de artículos de crítica social y política, es importante destacar que el punto más álgido de su letra lo marcó con los artículos costumbristas y sociales. En ellos, la viveza de los diálogos y la ironía con la que se expresaba continuamente, hacían que éstos alcanzaran la pureza crítica.
Además de esto, otro aspecto destacable de sus escritos era su profunda involucración en las desigualdades sociales, de ahí que no dudara en criticar duramente el papel inútil que desempeñaba la burguesía para la sociedad.
Su compromiso con los problemas del país se reflejaba también en sus escritos haciendo hincapié en los problemas que abundaban en la sociedad española. Sin embargo, no sólo criticaba lo malo, sino que también destacaba las virtudes que tenía la nación, todo ello con la intención de no sentir inferioridad patriótica.
En sus artículos titulados «Vuelva usted mañana» y «Nadie pase sin hablar con el portero» habla de manera dura e irónica del tema del que hemos hablado anteriormente de la burguesía.
Por otro lado, el artículo llamado «En este país» hace una sátira de la mala costumbre que tienen los españoles de dramatizar y recrearse en los problemas que tiene y alabar lo bien que se encuentran los demás.
Por su parte, el artículo «Un reo de muerte» realiza su crítica con un semblante irónico de la sociedad porque en ciertas ocasiones es capaz de convertir la muerte y todo lo que le rodea en un espectáculo.
Pero, con diferencia, los artículos más importantes de Mariano José de Larra, considerados obras maestras fueron los titulados «El día de Difuntos de 1836» y «La Nochebuena de 1836». En ellos, se refleja con una sinceridad abismal la amargura y el nihilismo en los que se sentía sumergido. La ansiedad que le provocaba el atraso evidente de la sociedad española frente a la evolución de otros países, los problemas continuos y sin solución de la política y las dificultades por las que estaba pasando en su vida personal, lo sumieron en una depresión de tal nivel que el suicidio fue la única manera de salir de esta «agonía».
Con respecto al estilo de Mariano José de Larra, es evidente su rebeldía y su inconformismo. La fórmula que lo caracterizó se basa en hacer un retrato de la vida de manera confusa y caótica.