Poesía de los años 50
La poesía existencial, conocida como el movimiento literario que se desarrolló después de la Guerra Civil en España, fue la que dio pie a un nuevo tipo de poesía de denuncia que destacó en la literatura de los años 50. Su principal meta era la de hacer uso de todas las manifestaciones artísticas para conseguir cambiar la situación en la que se encontraba el mundo. Tendrán como referencia las obras de Antonio Machado relacionadas con los postulados marxistas. La técnica de este movimiento literario es muy precisa utilizando recursos como: los sonetos clásicos, el versolibrismo o los ritmos populares.
A diferencia de la poesía pura, la concepción de la poesía de los años 50 toma como principal instrumento a la solidaridad.
Con respecto a la temática utilizada, los principales eran: la libertad, la injusticia y la alienación, todos ellos siempre relacionados con la solidaridad que debería existir en España.
Leopoldo de Luis
Nació en Córdoba en el año 1918 y murió en Madrid en el 2005. Desde el primer momento reconoció la influencia que había recibido de Antonio Machado, Vicente Aleixandre y Miguel Hernández. Los temas que utiliza en su poesía es: la autobiografía, el amor doméstico, lo social, el rechazo a la injusticia y la introspección existencial. Sus obras más importantes fueron las tituladas “Huésped de un tiempo sombrío”, publicada en el 1948, “Teatro Real” del 1957 y “Juego limpio” del 1961, todas ellas mezclan este sentimiento de denuncia y desasosiego existencial.
Gabriel Celaya nació en Hernani en el año 1911 y murió en Madrid en el 1991. Después de una primera etapa creativa existencial con obras como la titulada “Tranquilamente hablando”, del año 1947, se convierte en el principal poeta comprometido de la poesía de los años 50 española. Con sus obras “Las cartas boca arriba” del 1951 y “Cantos íberos”, del 1955, en la que se centró en defender a las clases populares y la libertad.
José Hierro nació en Madrid en el 1922 y murió en el año 2002. Aunque este autor no fue muy valorado al principio de su carrera literaria, años después se convirtió en una de las figuras más influyentes y emblemáticas de la poesía de su tiempo. Sus obras evocan una profunda emoción derivada del amor por la vida y el dolor que vivió durante su juventud. La temática que utiliza en sus obras estaba sobretodo relacionada con lo fugaz que es el tiempo y el amor, tratados siempre con un aire de melancolía. Su obra titulada “Quinta del 42”, publicada en 1953, es una obra poética social. Otra de sus obras fue “Libro de las alucinaciones” del 1964 y “Cuánto sé de mí”, del 1974.
Por último, aunque no menos importante, merece la pena destacar a Blas de Otero que fue, sin duda, el poeta más emblemático de la poesía social comprometida de los años 50 en España.