Rima y métrica
Todos sabemos que la literatura puede estar escrita, básicamente, de dos formas: en verso o en prosa. El mundo del verso es el de la poesía, y este mundo se rige por una serie de reglas y particularidades que lo hacen especialmente genuino. Una de esas normas es la presencia de la métrica, y de todo el conjunto de reglas que ésta representa.
Uno de los aspectos de los que la métrica se ocupa con especial atención es la rima. La rima, palabra que se deriva del latín rhythmus, es la repetición de una secuencia de fonemas al final de cada verso, lo cual permite al poeta crear en el lector una afinada sensación de ritmo y una especial musicalidad.
Existen dos tipos de rima: la rima consonante y la rima asonante. El primer tipo de rima, la rima consonante, consiste en repetir todos los fonemas a partir de la última sílaba tónica de cada verso, de forma que coincidan tanto las vocales como las consonantes. Por ejemplo:
todo necio
confunde valor y precio
La rima consonante es la más fácil de captar por el lector y la que más eficientemente crea esa sensación de ritmo y musicalidad de la que antes hablábamos. No obstante, y precisamente por esto, es la más difícil de crear, dada la limitación a la que obliga al poeta, que ha de buscar palabras con finales absolutamente coincidentes.
Por otra parte, el segundo tipo de rima es la rima asonante. En este caso, los fonemas que han de coincidir al final de cada verso (después de la última sílaba tónica) no son todos, sino únicamente los vocálicos. Por ejemplo:
Más vale pájaro en mano
que ciento volando
Aquí lo único que coincide es la «a» y la «o» de las dos últimas sílabas de cada verso. Naturalmente, el lector puede captar este tipo de rima, que es más sutil y menos evidente que la anterior, si bien el ritmo y la musicalidad no son tan fáciles de crear como con la rima consonante. El poeta, generalmente, utiliza otro tipo de recursos adicionales para pulir el ritmo del poema, tales como paralelismos u otros recursos. Por otra parte, la libertad del autor es mucho mayor, ya que lógicamente es más fácil encontrar palabras que rimen de forma asonante frente a la limitación consonántica que veíamos antes.
Tradicionalmente, la rima consonante ha estado más asociada a la literatura culta y cortesana, y la rima asonante a la literatura popular. No obstante, hoy en día estas asociaciones ya no son del todo válidas y la opción por un tipo de rima u otro es meramente personal por parte del poeta.