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Partes en las que se divide un libro I

Publicado por A. Cerra

No todos los libros son iguales. No es lo mismo una novela que un diccionario, un libro del colegio o un tratado sobre una tesis académica. Cada tipo de publicación tiene sus apartados específicos. Y a continuación vamos a intentar presentarlos.

El título. Este apartado es común a cualquier tiempo de publicación. Siempre ha de haber un título, es la manera de reconocer a cada libro. Es su nombre. Y aunque haya modas, como la actual de poner largos títulos que son casi oraciones completas, lo cierto es que lo ideal es hallar un título conciso y breve, con pocas palabras. Evocativo en el caso de algo literario, y descriptivo para publicaciones más formales.

En estos últimos casos, a veces los títulos para ser descriptivos suelen ser una larga frase resumiendo la tesis de la publicación o enumerando su contenido. Sin embargo, siempre se tiende a la reducción. Por ejemplo, la obra magna de Charles Darwin se conoce mundialmente como El origen de las especies, pero su autor originalmente la llamó:

Las informaciones bibliográficas. Cualquier publicación ha de contener varios datos bibliográficos que constituyen de alguna manera el registro de esa publicación. Este tipo de datos son de lo más diversos. Es decir, por un lado aparece la editorial que lo publica, con su dirección, y ciudad de origen.

También aparecen los datos de la edición, el número, la fecha y el lugar. Así como se incluyen los datos de la imprenta donde se ha impreso. Y por último, también deben estar los datos relativos a la Propiedad Intelectual, el ISBN o el Depósito Legal. Por cierto, ¿qué es el ISBN? Son las siglas de International Standard Book Number, y son un número único para esa publicación.

El índice de contenidos. Generalmente al comienzo del libro aparece el índice, aunque hay veces que se pone al final. Sin embargo, lo más académico y también práctico es presentarlo al inicio, de manera que el lector puede hacerse una idea de lo que le espera en las siguiente páginas, cómo se han distribuido cuantitativamente las temáticas o qué orden se ha elegido.

El índice viene a ser el resumen de la estructura general de la publicación, y también debe ser muy preciso, ya que deben aparecer los títulos de los capítulos y subcapítulos, los cuales al igual que el título general de la obra deben ser concisos. Por cierto, hay que poner especial cuidado, en que esos títulos coincidan exactamente con los puestos en el interior, así como es muy importante que la paginación aportada sea la real. Eso no tiene tanta importancia en una novela, pero sí para los libros prácticos, manuales o libros de texto es un elemento clave para que tengan su uso sea lo más eficaz posible.