Lengua
Inicio Libros, Literatura Diarios de Anaïs Nin

Diarios de Anaïs Nin

Publicado por A. Cerra

Retrato de Anaïs Nin

Anaïs Nin escribió sus famosos Diarios a lo largo de toda su vida (1903 – 1977) ya que comenzó a redactarlos a la tierna edad de 11 años, si bien es cierto, que estos libros, siete en total, o los manuscritos originales de 35.000 páginas, son conocidos con muchos calificativos menos el de tiernos, ya que son muchísimo más famosos por la carga erótica que se desprende en gran parte de sus pasajes.

Que comenzara a escribir a los 11 años se debió a un detonante clave en su vida, el abandono de su padre de origen cubano-español a ella, a su madre y a sus dos hermanos. De hecho, sus diarios comienzan con una carta dirigida a su padre.

A partir de ahí nos cuenta su vida, con sus diferentes amores, algunos tan sonados como el que mantuvo con el escritor Henry Miller, y también con su mujer June. Y lo cierto es que Anaïs Nin que finalmente se nacionalizó estadounidense, estaba destinada a ser allí la primera mujer que publicara relatos eróticos, hasta pornográficos, primero de forma anónima y décadas más tarde ya reconociendo su autoría.

El caso es que por esos relatos y por los diarios que también comenzó a publicar en los años 60, la autora ha sido aclamada como una de las autoras de literatura erótica más importantes, y toda una pionera en la cultura de Occidente.

Lo cierto es que leyendo su obra se nos muestra un personaje complejo, y políticamente incorrecto en muchas cuestiones. Porque a lo largo de sus diarios vemos que es una mujer bígama durante gran parte de su vida, con amantes varios, que tuvo un aborto en un avanzado estado de gestación, y que incluso no queda claro si llegó a mantener una relación incestuosa con su padre, con el que se reencontró unos 20 años después de su abandono. Es decir, una vida escandalosa. Por esa razón cuando se comenzaron a publicar sus diarios, salieron parcialmente censurados, ya que muchas personas a las que hacían referencia estaban todavía vivas. Y ha sido en ediciones posteriores cuando ya se citan nombres concretos.

Por todo ello no ha de extrañar que no fuera fácil la publicación de algunas de sus obras, y fue ella misma quién tuvo que comenzar autoeditándolas. Por eso, por su valentía al contar su vida y por lo qué cuenta no solo fue una pionera del erotismo, sino incluso del feminismo y de la liberación de la mujer. Todo un éxito que casualmente le llegó cuando comenzó en 1966 con la publicación de sus Diarios, ya que antes aunque había publicado novelas y sus relatos sin firmar, pero no había triunfado. En cambio, su propia vida traspasada al papel le reportó la fama y el prestigio, e incluso llegó a ser nombrada Doctor Honoris Causa por el Philadelphia College of Art.