Gonzalo de Berceo
Como máximo exponente del “mester de clerecía” en el siglo XIII encontramos a Gonzalo de Berceo, autor educado en la Universidad de Palencia y relacionado con el monasterio de San Millán de la cogolla.
Gonzalo de Berceo conjuga el uso de fuentes eruditas con el empleo de la lengua romance, y así se nos muestra un autor culto que busca la divulgación de su obra con fines propagandísticos. Observamos su alta formación en una serie de aspectos que podemos resumir en:
– El empleo de recursos retóricos como el asíndeton, el polisíndeton, la anáfora, la metáfora, el símil y el hipérbaton.
– Alusiones a las fuentes escritas.
– Menciones al auditorio.
– El empleo del diálogo como forma de expresión textual.
En cuanto a la temática podemos dividir sus obras en hagiográficas (vidas de santos), doctrinales y marianas.
En las obras hagiográficas encontramos los títulos La vida de Santo Domingo, La vida de San Millán, La vida de Santa Oria y el Martirio de San Lorenzo.
En las dos primeras, La vida de Santo Domingo y La vida de San Millán, Berceo relata la vida del santo protagonista de la obra, los milagros que realizó durante su vida y aquellos efectuados tras su muerte. Para escribir ambas obras Berceo recurre a fuentes escritas en latín. En La vida de Santa Oria se cuentan una serie de visiones celestiales cargadas de simbolismo, y en el Martirio de San Lorenzo encontramos tintes propagandísticos del monasterio emilianense.
Como obras doctrinales tenemos el Sacrificio de la Misa, donde se exponen todas las partes que componen la misa y Los signos que aparecerán antes del juicio donde Berceo aconseja al hombre para evitar que sea condenado. En ambas Berceo muestra una actitud didáctica.
Pero, aunque Berceo haya abordado distintas temáticas, es conocido principalmente por sus obras marianas. La nómina de obras que tratan esta temática está compuesta por los Loores de la Virgen, el Duelo de la Virgen y los Milagros de Nuestra Señora.
En Loores de la Virgen se ensalza la figura de María y se cuenta su importancia en la historia de la salvación.
En el Duelo de la Virgen , Berceo nos muestra como María cuenta a San Bernardo la pasión y muerte de Jesús y los sentimientos que le provocan estos hechos.
Los Milagros de Nuestra Señora es sin duda la obra más aplaudida de Gonzalo de Berceo, compuesta por 25 milagros y una introducción alegórica, en ella la figura de la virgen es ensalzada por el autor.
En esta obra Berceo vuelve a inspirarse en fuentes latinas y recoge la devoción hacia la virgen María existente en aquella época.
Podemos clasificar los veinticinco milagros que forman la obra en tres grupos:
1. Aquellos milagros en los que María premia o castiga al protagonista.
2. Aquellos milagros en los que María concede el perdón al protagonista.
3. Aquellos milagros en los que María ayuda a la conversión del protagonista.
Estos milagros siempre están estructurados de la misma forma:
– Tentación del diablo.
– El protagonista que peca.
– Milagro efectuado por la virgen María.
