José Agustín Goytisolo
El poeta José Agustín Goytisolo mezcla en su poesía el lenguaje coloquial con la ironía. Como miembro de la Escuela de Barcelona, sigue la línea poética de Gil de Biedma en la exposición de su propia experiencia combinada, en su caso, con aspectos de denuncia social. Perteneciente a una familia de escritores, fue el primero de los hermanos Goytisolo en alcanzar la fama. En un bombardeo nacionalista perdió a su madre, trágico suceso que marcó para siempre al poeta. Goytisolo homenajea a su madre poniéndole su nombre a su hija, a la cual dedicará uno de los poemas más famosos del autor: “Palabras para Julia”. Termina sus estudios de Derecho en la capital de España, Madrid, y es allí donde tiene contacto con otros poetas del momento como Valente o Caballero Bonald y también con novelistas de la talla de Carmen Martín Gaite o Martín Santos, con quienes compartía ideas políticas, eran pertenecientes al Partido Comunista, y noches llenas de bohemia y alcohol.
En cuanto a su obra, comenzaremos diciendo que recibió el premio Boscán en el año 1956 con su obra Salmos al viento; anteriormente, ya había conseguido algún premio de menor importancia como el Adonais. Más tarde, en el año 1959, obtiene el premio Ausias March con el libro Claridad. Tras estos éxitos, Goytisolo sufre una especie de crisis creativa y, en 1961, compila sus poemas en la obra Años decisivos.
El tema social ocupa gran parte de su siguiente libro, Algo sucede, de 1968. En él, también está omnipresente la concepción de la poesía como conocimiento. Después publicará las obras Bajo tolerancia y Taller de Arquitectura, en los años 1973 y 1977 respectivamente. Ya en los años ochenta, tenemos los títulos Del tiempo y del olvido y Sobre las circunstancias. En la década de los noventa publica La noche le es propicia , en este libro el amor es el protagonista de todos los poemas que lo componen y está dedicado a un poeta que también cantó al amor, Pedro Salinas. El libro se halla, pues, claramente en consonancia con esa poesía de la experiencia imperante en su generación. Todos los poemas dedicados a la figura de la madre se recogieron en 1993 en un mismo libro titulado Elegías a Julia Gay. En 1994, aparece la obra Como los trenes de la noche, donde el poeta, con sus versos melancólicos, invita al lector a reflexionar y meditar. Sus últimos libros de poemas también están escritos en los noventa, concretamente en 1995, cuando publica Cuadernos de El Escorial y en 1997, cuando aparece Las horas quemadas, libro en el que Goytisolo ofrece al lector una biografía en forma de imágenes comentadas.
José Agustín Goytisolo fue un hombre de una sensibilidad extrema que le produciría un estado de sufrimiento cercano a la depresión que le llevaría al suicidio. Pero junto a esta parte gris, existía en el poeta otra parte amante de la vida, la bebida, los excesos, una parte que gozaba y disfrutaba la vida compartiendo alegrías y sonrisas. Fue el primero de los poetas de su generación en alcanzar el éxito, pero cuando emergieron otros poetas como Valente, Biedma o Claudio rodríguez quedó relegado a un injusto segundo plano.
