Rimado de Palacio, de López de Ayala
El escritor Pero López de Ayala es un autor que había recibido formación tanto humanística como eclesiástica y vivió en la corte ejerciendo el cargo de Canciller Mayor de Castilla. Escribió Crónicas que resultan de vital importancia desde un punto de vista histórico, algunas de ellas son las dedicadas a Pedro I, Juan II o Enrique I. Junto a las Crónicas, López de Ayala escribe obras como Libro de la caza de las aves, muy popular en el ambiente cortesano, o Las flores de los morales de Job. Además también se dedicó a la traducción y escribió poemas que podemos hallar en el Cancionero de Baena. Pero, sin duda, el texto que le ha proporcionado mayor reconocimiento es el Rimado de palacio, obra que sitúa en los últimos momentos del mester de clerecía. El poema está formado por 8.200 versos con la cuaderna vía como principal estrofa. A lo largo del tiempo ha recibido distintos títulos como De las maneras de palacio o el Libro de palacio, pero actualmente se conoce como Libro rimado de palacio. Dos son los códices que se conservan de este poema, aunque ambos incompletos, uno en la Biblioteca de El Escorial y otro en la Biblioteca Nacional.
El texto se divide en diversas partes: la primera comprende las primeras 705 estrofas, todas ellas en caderna vía, y la segunda se extiende hasta la 887, donde se combina la cuaderna vía y otras estrofas cantables más ligeras. En esas estrofas se canta a la virgen a diversos santuarios. En la tercera parte trata el tema del cisma de Occidente, asunto que preocupaba al hombre cristiano de la época. Y en la cuarta, recupera de nuevo el uso regular de la cuaderna vía.
Temáticamente, esta es una obra heterogénea. En la primera parte, el autor realiza, sin piedad, una sátira de la sociedad de aquella época. No deja fuera ningún estamento de la sociedad y presenta escenas de una gran crudeza donde la Iglesia, la corte y la propia realeza no salen bien paradas. La segunda parte posee un carácter más lírico, aparecen canciones a la Virgen y también oraciones de súplica. En la tercera, el autor glosa textos como Las morales de San Gregorio o El libro de Job y mezcla lo doctrinal con lo moralizador. En esta parte podemos observar las costumbres del siglo del autor, el XIV.
Toda esta variedad de temas encuentra la unidad en la figura del autor, como también ocurre en otras obras como el importante Libro de buen amor.
La poesía de este autor surge ne una época convulsa para España, donde las guerras civiles, el cisma de Occidente, la presencia de enfermedades como la peste negra, las dificultades económicas o el enfrentamiento entre religiones complica la existencia de las gentes del momento. Ante esta situación, López de Ayala se propone, por medio de su poesía, reformar la sociedad instaurando nuevos valores morales. Su ideología es plenamente conservadora y su visión de la vida tremendamente pesimista, ya que ni la religión, ni la política ni la economía gozan del beneplácito del autor.